El trabajo se desarrolló durante el periodo de octubre de 2017 a junio de 2018, con el objetivo de evaluar la calidad del suelo Pardo mullido medianamente lavado en la Unidad Básica de Producción Cooperativa “Jesús Menéndez”, perteneciente ECV “Valle de Yabú”. Para ello se realizó el muestreo de suelo en cinco áreas o zonas de manejos, representada por diferentes cultivos (mango, plátano, frijol, boniato y papa), de 0 a 20 cm de profundidad. Se realizaron análisis físicos del suelo: agregados estables, factor de estructura y coeficiente de permeabilidad. El índice de calidad de suelo (ICSA) se calculó según Andrews et al., (2002), a partir de tres de los indicadores (agregados estables, factor de estructura y coeficiente de permeabilidad) y se comparó con el valor de calidad de cada indicador que propone Yera (2012) para este tipo de suelo. Los resultados obtenidos demostraron que los sistemas de mango y boniato ejercen mejor efecto integral sobre las propiedades físicas del suelo. La agricultura convencional que se aplica al cultivo de la papa afecta significativamente las propiedades del suelo y con ello su calidad, el ICSA es igual a 2,68. El factor de estructura y los agregados estables son las propiedades físicas más sensibles a los cambios de manejo, llegando ambos a la categoría de excelente en el mango. Los sistemas de mango y boniato son los únicos que superan al diagrama de calidad con ICSA por encima de tres.