Este trabajo analiza la relación entre educación ciudadana, políticas públicas y participación, explorando sus fundamentos teóricos y prácticas democráticas en contextos contemporáneos. El objetivo principal es examinar cómo la educación cívica fortalece la participación ciudadana y su incidencia en el diseño e implementación de políticas públicas, con miras a promover sociedades más inclusivas y deliberativas. Para ello, se emplea una metodología cualitativa basada en revisión documental de marcos teóricos (como democracia participativa y pedagogía crítica) y estudios de casos emblemáticos en América Latina y Europa, contrastando modelos educativos y mecanismos de participación. Los resultados revelan que: 1) la educación ciudadana es un eje transversal para la consolidación democrática, pero su impacto depende de su articulación con políticas públicas coherentes; 2) las prácticas participativas (presupuestos participativos, consejos consultivos) son más efectivas cuando existen procesos educativos continuos que empoderen a la ciudadanía; y 3) persisten brechas entre la teoría normativa y su aplicación, debido a factores como la desigualdad socioeconómica o la falta de voluntad política. Se concluye que la sinergia entre educación, políticas públicas y participación requiere marcos institucionales flexibles, recursos sostenibles y enfoques pedagógicos situados, capaces de adaptarse a diversidades culturales.