La crisis energética y la contaminación medioambiental son dos de los grandes problemas que enfrenta la humanidad. Por tal razón se investigan fuentes alternativas para disminuir el uso de combustibles y lubricantes de origen mineral y de esa forma minimizar sus efectos nocivos al medio ambiente. Los aceites vegetales son biodegradables y menos dañinos al entorno por lo que son considerados como una alternativa para la producción de biolubricantes. Uno de los aceites vegetales más estudiados en la actualidad es el aceite de Jatropha curcas, pues ha despertado mucho interés debido a que puede ser utilizado para producir biodiésel y biolubricantes. Este trabajo tiene como objetivo determinar la biodegradabilidad aerobia del aceite de Jatropha curcas y de una biograsa con él formulada, mediante la prueba de Sturm modificada de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE). El aceite de Jatropha curcas tuvo un 39 % de biodegradabilidad, siendo menos biodegradable que los aceites de oliva y soya, pero más biodegradable que el aceite mineral. La biograsa formulada con este aceite como base, tuvo 32,6 % de biodegradabilidad, siendo menos biodegradable que grasas lubricantes formuladas a base de polialfaolefinas y aceite de colza y más biodegradable que la formulada con aceite mineral. El aceite de Jatropha curcas y la biograsa formulada con este aceite, se clasifican como no biodegradables de manera inmediata.