La acción antrópica facilita la presencia de especies vegetales que incrementan el número de sus individuos y poblaciones; también amplían su distribución de acuerdo a preferencias marcadas, según se trate de especies invasoras alóctonas o expansivas autóctonas. Se ofrece el resultado de cuatro estudios de caso en Cuba en el que se analizó el siantropismo de la flora. En cada uno de ellos se distinguió entre los apófitos, con sus respectivas categorías, y los antropófitos y parapófitos. Los casos de estudios corresponden a la vegetación cársica y humedal del Área protegida Mogotes de Jumagua, en Sagua la Grande; matorral xeromorfo espinoso sobre serpentina de Motembo y de Sabanas de Santa Clara, y vegetación litoral de Cayo Santa maría.  Se aprecia un alto porcentaje de especies sinatrópicas apófitas, lo que evidencia el carácter de recuperación de la flora cubana, por lo que resulta importante el adecuado manejo en el proceso de restauración ecológica. Los intrapófitos pioneros, primeros en establecerse en el proceso sucesional, los intrapófitos en sentido estricto e intrapófitos recuperadores, con altos porcentajes de presencia juegan un papel importante en el restablecimiento de las condiciones naturales en un área perturbada; mientras que los extrapófitos, que exceden su hábitat ante una perturbación, constituyen un alto riesgo por su carácter expansivo.