El proceso inversionista cubano se perfecciona con una nueva política que se gesta desde la Asamblea Nacional del Poder Popular, el Consejo de Ministros, el Ministerio de Economía y Planificación y el resto de los Organismos de la administración central del estado del país, hasta el nivel empresarial y de gobiernos locales. Los cambios en la normativa, han tenido una continuidad en la capacitación y preparación de la fuerza técnica y profesional asociada a dicho proceso. Desde el 2015 en Villa Clara se gestó un proceso de formación encaminado a alcanzar el conocimiento necesario e indispensable del proceso inversionista. Fruto de la compilación de la mayor cantidad de trabajos finales discutidos entre los profesionales capacitados en dichos ciclos de formación, se obtiene una sistematización de los problemas y principales soluciones que se vienen asumiendo, por estos, en la búsqueda de la eficacia y eficiencia de las inversiones en el país. Este trabajo evalúa los principales problemas y mejores soluciones prácticas de aquellos que se han venido aplicando, al menos, en el centro de Cuba. Se discuten las tendencias que mayor presencia han tenido en las mejores prácticas del país para perfeccionar el proceso inversionista y contribuir con ello a la indispensable prosperidad deseada. Es posible que entre los resultados de estas prácticas asumidas se ubiquen los gérmenes de futuros perfeccionamientos de la política de inversiones que Cuba deberá seguir realizando.