El combate a la pobreza y la erradicación del hambre constituyen desafíos fundamentales de gobiernos y organismos internacionales, ante un escenario global en el que las personas afectadas por este flagelo ascienden a 815 millones, según estimaciones de la FAO en su informe de 2017 sobre el Estado de la Seguridad Alimentaria y Nutricional, SAN. En América Latina y el Caribe ocurrieron avances notables en el periodo 2000-2016 durante el cual la prevalencia de la subalimentación descendió de 12% a 6.6%. Las políticas de SAN implementadas en países como Bolivia, Nicaragua, Venezuela, entre otros, influyeron en dicho logro. En el Caribe, sobresalen los esfuerzos en el caso de Cuba, aunque la prevalencia en la subregión es de 18% en este mismo periodo. En la región, el enfoque sectorial de la lucha contra el hambre ha cambiado a un enfoque transversal e intersectorial. Parte de los avances en la materia se deben a políticas más integrales y multidimensionales, que permiten responder a necesidades de la población tanto en el corto como mediano plazo. El presente trabajo realiza un análisis de los principales fundamentos teóricometodológicos acerca de la seguridad alimentaria y nutricional, la soberanía alimentaria y la cooperación regional, con particular relevancia en América Latina y el Caribe. Se utiliza el método inductivo-deductivo, de análisis-síntesis, histórico-lógico que contribuyen a la investigación. Finalmente se muestra los indicadores de la seguridad alimentaria y nutricional de la región, así como los principales avances en materia de la cooperación y reducción del hambre a partir del empleo de estrategias y programas para la seguridad alimentaria y nutricional.