El desarrollo de las nuevas tecnologías ha generado un cambio de gran envergadura en el panorama global. Esta era tiene a la información como rasgo distintivo al convertirla en el centro de la organización social y la principal fuente de riqueza y poder. Es en éste marco que el derecho a la comunicación ha comenzado a tener alta connotación, aunque se manifiestan conflictos entre diversos derechos que se relacionan con éste y a través de los cuales incluso, llega a realizarse dado su carácter instrumental. En ocasiones, se denomina desde la perspectiva de la libertad de expresión, del derecho a la información o a la libertad de prensa, sin distinguir un contenido esencial propio y diferente de los derechos citados. El derecho a la comunicación reclama la existencia de espacios tecnológicos y sociales abiertos para el intercambio de información, el debate y el diálogo, que faciliten la construcción de consensos, materialicen la participación y fortalezcan la ciudadanía. La presente ponencia analiza el impacto de las tecnologías de la informática y las comunicaciones para el ejercicio y tutela del derecho a la comunicación, además de formular el derecho a la comunicación como un derecho humano que permite ordenar y articular los diversos elementos que componen la comunicación, para dejar en claro que éste tiene que ser configurado al servicio de todos los derechos. De ahí la importancia de formular las bases teóricas de los elementos constitutivos que lo hacen autónomo y a su vez con un carácter instrumental.