Las primeras cuatro décadas de la denominada etapa republicana cubana, se vinculan a un auge en la producción azucarera, en especial en el período de la I Guerra Mundial, lo que trae aparejado un incremento de la arquitectura doméstica destinada a la pequeña y mediana burguesía.

Desde el punto de vista expresivo se exterioriza una influencia del eclecticismo, que por su permanencia tan prolongada posee tres variantes decorativas, que se aprecian en sus fachadas y que aunque tienen aspectos generales, se distinguen diferencias que logran una identidad muy particular en las diferentes regiones del país.

El objetivo del trabajo es mostrar los resultados obtenidos en diferentes investigaciones al nivel nacional, donde se denota la identidad local que se alcanza a través de la ornamentación de las fachadas en las diferentes variantes estilísticas. Entre los ejemplos se destacan las diferencias entre ciudades seleccionadas en la región occidental, central y oriental, sobre todo en su etapa inicial comprendida entre las dos primeras décadas del siglo XX.