El flujo de movimientos académicos, estudiantiles y profesionales, así como las estancias temporales de estudiantes, profesores, eventístas, cursantes, aspirantes y visitantes en instituciones de educación superior, fuera de sus lugares de residencia habitual, pueden ser considerados parte del turismo académico o turismo de eventos. Impulsado por diferentes programas de eventos en instituciones de Educación Superior, esta tipología de turismo, ha experimentado un crecimiento muy importante en los últimos años, reportando ingresos considerables a las instituciones universitarias y promoviendo la comunicación científica entre los participantes, la transferencia de “know-how”, los valores y la identidad universitaria. Los eventos han emergido considerablemente en las instituciones de Educación Superior debido al aumento de los desplazamientos y la necesidad del ser humano de confrontar experiencias y transferir el conocimiento. La comprensión de los eventos es multifactorial y compleja ya que se ha convertido en una forma de antídoto para palear los altos gastos que generan los procesos sustantivos universitarios a partir de una nueva captación de ingresos por concepto de servicios académicos, convirtiéndose en una alternativa para la gestión económica-financiera sostenible de instituciones públicas de Educación Superior que combinan las actividades académicas en escenarios muy favorables donde el intercambio, el ocio y la recreación se expresan de manera convencional en estos mismos espacios.