La adaptación al cambio en el contexto de la industria 4.0 representa un desafío crucial para la dirección y gestión de empresas en Cuba. La industria 4.0, se caracteriza por la integración de tecnologías, y está transformando los modelos de negocio, exigiendo mayor flexibilidad, innovación y digitalización. En Cuba, este proceso enfrenta obstáculos específicos debido a las limitaciones tecnológicas, la obsolescencia de infraestructura, restricciones económicas, un entorno regulatorio complejo, el acceso limitado a internet y la falta de inversión. La adopción de estas tecnologías requiere una reestructuración organizativa, capacitación de personal y una mentalidad orientada al cambio, lo que  implica alinear la cultura organizacional con los principios de agilidad y competitividad. Los objetivos de la investigación persiguen evaluar las estrategias de dirección para fomentar la innovación y la capacitación, además de proponer políticas que articulen la colaboración público-privada y reduzcan las brechas digitales.  Los principales resultados apuntan a que estas transformaciones incluyen mejoras en la eficiencia operativa, reducción de costos y mayor capacidad para competir en mercados internacionales. Generando además  riesgos de ciberseguridad y  necesidad de políticas públicas que promuevan la innovación. La metodología aplicada es mixta utilizando encuestas a directivos y trabajadores, simultáneamente con entrevistas a expertos en economía y representantes institucionales. La industria 4.0  en Cuba no es solo un tema tecnológico, sino un desafío de gestión que requiere reformular políticas laborales, incentivos a la innovación y liderazgos adaptables. Las empresas que logren equilibrar eficiencia tecnológica con inclusión social serán clave para un desarrollo sostenible.